Para hacer frente a la pérdida de colágeno a lo largo de los años, ciertamente existen tratamientos cosméticos, pero también alimentos que favorecen la producción de esta proteína en el organismo. Una estrategia eficaz para adoptar lo antes posible.
Muchos alimentos favorecen la síntesis de colágeno, esta proteína que frena los efectos del envejecimiento cutáneo al restaurar la dermis, asegurando así el tono y la firmeza. Más allá de la piel, el colágeno está presente en músculos, uñas, cabello, huesos y articulaciones para asegurar su elasticidad y fuerza. Una producción constante de colágeno por parte del cuerpo también ayuda a prevenir el dolor en las articulaciones y el desgaste muscular.
Nutrientes esenciales
Los alimentos que aportan colágeno directamente al organismo son escasos: yema de huevo, caldo de huesos de carnes y gelatina. Pero muchos son esenciales para la producción y protección del colágeno.
Los más importantes son los aminoácidos (glicina, arginina, lisina y prolina en particular), las vitaminas C, A y E, zinc, silicio y azufre. Los ácidos grasos esenciales también juegan un papel en la protección de las fibras de colágeno, una buena razón para optar por las semillas oleaginosas como las almendras, las nueces, el sésamo, pero también las legumbres como las habas, los guisantes partidos y los garbanzos, las alubias blancas y rojas. No olvides los cítricos ricos en vitamina C y los aceites por su vitamina E.
Los 7 alimentos claves para el colágeno
1. Caldo de hueso
Reconocido como muy saludable para la salud por los antiguos, el caldo de huesos se recomendaba a los enfermos, convalecientes y trabajadores. Suministra directamente al cuerpo colágeno. El caldo de res, hecho con huesos de tuétano, es el más efectivo.
2. Salmón
Aporta ácidos grasos ricos en omega-3 para nutrir la piel, suavizarla y sobre todo zinc para movilizar las proteínas que entran en la arquitectura de las nuevas fibras de colágeno.
3. Carnes
Fuente de aminoácidos, especialmente glicina y prolina, dos aminoácidos que forman parte de la arquitectura de la fibra. De preferencia: bistec de res, pollo, cerdo y pavo.
4. Los productos lácteos
Son los aminoácidos, particularmente la prolina y la lisina, contenidos en la leche, los yogures y los quesos los que contribuirán al desarrollo de las fibras de colágeno en el cuerpo.
5. Huevos
Las membranas de la yema proporcionan colágeno directamente. Además, su riqueza en azufre facilita su elaboración.
6. Aguacate
Es fuente de antioxidantes y vitamina E, dos compuestos que juegan un papel clave para limitar la degradación de las fibras de colágeno y, por tanto, el envejecimiento de la piel.
7. kiwi
Su alta concentración de vitaminas potencia la producción de colágeno. También tiene la ventaja de aportar vitaminas A y E que luchan contra el envejecimiento de la piel.
También, sobre todo, no olvides beber agua y comer frutas y verduras crudas ricas en agua. La piel hidratada es un entorno propicio para la producción de fibras de colágeno.
